Comentario del libro:
Liébana es Lugar de peregrinación y espiritualidad en Cantabria, con este sentimiento se aproxima Matilde a los pueblos que componen esta bella zona; Se publica este libro con motivo del Año Santo Lebaniego de 1977 quiso dedicarlo desde la primera página: “A todos los lebaniegos y a los que llegaran a esa bella zona en el futuro, fervorosamente o buscando paz y belleza”..
En el año 2006, nuevo Año Santo Lebaniego, se hacen una 2ª edición del libro Cancionero de Liébana y la cantautora Inés Fonseca, pone música a algunos de sus poemas: QUIERO ALZARME , ESTACIONES DE LIEBANA: PRIMAVERA, VERANO, OTOÑO e INVIERNO
En uno de los viajes del matrimonio a esa bella tierra, descubren unos versos en piedra ensalzando las Serranillas del Marqués de Santillana a la mozuela de Bores y sale en defensa de su honor con el poema RÉPLICA AL MARQUÉS DE LAS SERRANILLAS, que fue musicado por el Maestro D. José Ramón Martínez Hernani, que fue Presidente del Ateneo de Santander, en el interior del libro puede verse la partitura..
El libro fue prologado por Florencio de la Lama Bulnes, Director en aquel momento del periódico “EL DIARIO MONTAÑÉS”..
La portada fue realizada por Justo Guisández y en el interior del libro hay un retrato de Matilde, apunte realizado por el pintor Emilio Hermosa.
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QUIERO ALZARME
Quiero alzarme del polvo de la tierra.
Ser poesía pura, ser palabra,
para ascender en recto pensamiento
de equilibrio, de fruto, de plegaria.
Así podré rezar si llora el Cielo
trasmutando dolor en esperanza.
Con ternura en las manos, en puntillas,
secaré con amor tan dulces lágrimas.
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Quiero alzarme del polvo de la tierra.
Vagar por el espacio en paz, callada,
meditando en el tiempo los errores
hasta borrar de mí todas las faltas.
Así podré cantar si canta el Cielo
derramando alegría con el alba.
El vigor expresivo de mi acento
limará las aristas que me nazcan.
AÑO SANTO LEBANIEGO
Jubileo glorioso, prolongado,
cruza la verde tierra y nos convida
mientras dejamos huellas de subida
en la pindia vereda del pasado.
Sentimos despertar apasionado
por la cálida dicha conseguida
al contacto del Leño de la Vida
donde estuvo Jesús crucificado.
Es Año Santo –abril- el Monasterio
abre las puertas del eterno imperio
proyectando con fuerza la palabra.
Se va nutriendo el alma, reverdece
todo a su alrededor, la paz nos mece
y la oración perfila, pule, labra. .
CANTO A LOS BOLOS
-Bolera de la Serna-
Salta la bola y empuja
al bolo viril y quieto;
el pase es finura y reto
con sortilegios de bruja.
En la tierra se dibuja
todo un mundo de emoción:
el jugador es pasión,
es fuerza de alta nobleza
y a la bola da fijeza
para ponerla en acción.
En la mano, moldeada
por la curva plena y prieta,
crecen ímpetus de atleta
cuando la bola es lanzada.
En la figura lograda
de discóbolo gigante
Hay plasticidad constante
desde el tiro hasta el emboque.
“Quien mejor birle y coloque
Demostrará más aguante…”
NAVIDAD EN POTES
La Navidad en Potes ha vestido
romancero de luna y profecía
al vivir hondamente la alegría
del Mesías soñado y prometido.
Liébana, prodigiosa, se hace nido
de piedad, de calor, de epifanía,
porque el Verbo, nacido con el día,
esplendente de amor ha florecido.
Es todo madurez aunque reciente:
el alba pujadora, el pan caliente,
la nieve sobre el prado, la pureza
del aire, entre castaños y romero,
desplegando contorno venturero
y, ante el Niño divino, sutileza.
¡RESPÓNDENOS!
Has conocido el tacto de la muerte,
la entrega universal del mediodía,
al Cristo lacerado en demasía
que bendijo el momento de tenerte.
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Un clavo taladró tu Leño fuerte
llegando a traspasar en su porfía
la substancia humanada, la energía
redentora, pilar de nuestra suerte.
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Y puesto eres alivio de quien pena,
llagado por el mundo y su condena,
¡respóndenos y seca nuestro llanto!
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Conmuévete Madero hasta la hondura
que reflejando luz en la hermosura
destruirás la angustia del quebranto.
ESTACIONES DE LIEBANA
PRIMAVERA
La yerba crece esmeralda.
la Primavera jugosa
abre la ventana rosa
y prende luz en su falda.
Hay suavidad de guirnalda
con crenchas de vida y sol
y el pájaro verderol
sigue desgranando trinos.
En los fresnos y en los pinos:
re-fa-si-la,
do-mi-sol.
VERANO
En el Estío abundoso
la espiga de piel mielada
dobla la carga dorada
del cultivo generoso.
Hay pureza en el airoso
y colmado girasol
después de mirar al sol
para granar las semillas.
En la paz de las orillas:
re-fa-si-la,
do-mi-sol.
OTOÑO
La vid se desangra en granos
que sudan de copa en copa.
El Otoño ya se arropa
con el cobre de sus manos.
Brisa y aire puritanos
ablandan el fuerte sol
que, desplegando arrebol,
pincela de alma el paisaje.
Los picos, bajo el celaje:
re-fa-si-la,
do-mi-sol.
INVIERNO
Gris el río, gris el cielo,
nieva, nieva sin cesar.
La nieve quiere dejar
su mensaje sobre el suelo.
Invierno, mágico velo
su tono de Si Bemol,
donde la Estrella es crisol
del vivo sentir humano.
Solfea el ángel cercano:
re-fa-si-la,
do-mi-sol.
ATALAYA DE AMOR
Atalaya de amor. Liébana pura.
Tierra donde la voz vive silencio,
se hace piedad, ternura peregrina,
con profunda razón de sentimiento.
Sólo tú, manantial de luz y escarcha,
apagarás la sed de los romeros,
esa sed tan antigua como el hombre
y tan llena de polvo como el tiempo.
Empolvados de duda y esperanza
caminamos a ti con ojos nuevos,
con estrenados labios donde crecen
escozores de culpas entre rezos.
Continuamos… Y el alma va cantando
la magnitud gozosa del encuentro
al descubrir tangibles claridades
en la verdad palpable del Madero,
en la acendrada esencia del contorno,
en las dulces estrías y en los huecos
donde quedó la sangre Redentora
de Cristo, al apoyar el brazo izquierdo. .
DESFILADERO DE LA HERMIDA
Cumbres impresionantes, escarpadas,
vigilan la angostura con empeño
y al adoptar tan noble desempeño
a su gesta de siglos van atadas.
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Su terreno arriscado es fiel adorno:
pico a pico, quebrado trecho a trecho,
conjunta tal poder que, por derecho,
mantiene la defensa del entorno.
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Todo es inmensidad, es sobresalto
creciente, fortaleza en desafío,
para quien llega indiferente, frío,
con los pies recamados del asfalto. .
RÉPLICA AL MARQUÉS DE LAS SERRANILLAS
“Mozuela de Bores
allá do la Lama”
púsote en amores.
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Pastora bravía,
pura como el prado
que nunca pisado
crece en gallardía
e guarda primores.
Pudorosa llama
non para amadores.
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Era muy fermosa,
discreta e consciente;
de alma transparente
como casta rosa.
De tales valores
“cual nunca vi dama
nin otra, señores”.
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Presto, sin demora,
dixo la beldad:
non quiero, en verdad,
el que aquí, agora,
en estos alcores
do brilla la Lama
me ofrezcáis loores.
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Mi buen caballero
“tiradvos afuera
dexad la vaquera
pasar el otero;
ca dos labradores”
me piden en Frama
entrambos pastores.
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Señores de Mendoza
e de Santillana,
id a otra fontana
que yo soy tan lega
en esas labores
que baño en mi flama
tan solo las flores.
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Y llegó el final
del simple suceso
“sin facer exceso”
porque fue cabal.
Lo afirman doctores
de cabe Espinama
e aldea de Bores..
RÉPLICA A LOS FALSOS “ENCOBRIDORES”
“Mozuela de Bores
allá do la Lama”
no cayó en amores.
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No mordió “el espino”
ni ofreció manzana
la pastora sana
de honrado destino.
No hubo “encobridores”
porque no hubo trama
de innobles favores.
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Lo afirma el otero
de viñas cuajado,
lo atestigua el prado
siempre tan sincero
y los labradores
que, viviendo en Frama,
son también pastores.
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Lo dicen las hoces,
el arado, el viento,
con profundo acento
de límpidas voces.
E todos, señores,
declaran su fama
e firmes pudores.
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Lo canta el Bullón
con rumor de fiesta
mientras la floresta
lo afirma en su son,
con nieve o calores,
que allá do la Lama
no hubo sinsabores.
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Lo dice la aldea
de viejas mansiones
en las ocasiones
que vive y hornea;
los alrededores,
el puente, “la rama”,
¡todos los alcores!
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Su querer entero
fue para el pastor
que, siendo el mayor,
era el más austero.
Casáronse en Bores
e cabe Espinama
cantaban las flores.